Una sensación extraña es la que ayer tuvimos en Nervión. Sensación que hacía tiempo que no se vivía, seis meses sin ir más lejos, desde aquel accidente frente al Almería.
Y lo de ayer parece que también lo fue. Un accidente en un partido que se torció desde el principio, desde que Konko notó unas molestias que le impidieron jugar a última hora el partido. Mal presagio.
Todo continuó con una jugada extraña en la que los nervios parecieron apoderarse de la defensa sevillista, por primera vez en la liga, y que hizo que hasta tres jugadores entraran a la vez a un jugador del Málaga que hábilmente dejó el balón para que un compañero totalmente desmarcado debido a la falta de defensores restantes batiera casi a placer a Palop.
Ahí se acabó el partido. La falta de físico se tradujo en falta de ideas. Unos cambios quizá precipitados y un rival totalmente replegado y casi sin interés en salir a la contra hicieron el resto.
Toda la razón le doy al entrenador cuando dice que las rotaciones no están para que jugadores que juegan se lesionen y jugadores que estaban lesionados pasen a titulares recién recuperados.
Suena a excusa, pero tarde o temprano la plaga de lesiones se debe notar en el maratón de partidos que tiene el Sevilla, es la pura verdad. Bastante hacen algunos futbolistas con aguantar los noventa minutos corriendo.
Adriano ayer no fue el del jueves, que jugó los noventa minutos, Navas aun menos, Renato igual, Luis Fabiano y Chevantón pusieron sus ganas, pero posiblemente les falte ese partido de recuperación, del que hablamos, para estar al cien por cien.
Palop no, él se lleva un record totalmente merecido y ayer, a pesar de perder la inbatibilidad, hizo un partido de grande del fútbol. Lo que es.
Ayer volvió la derrota a nuestro casillero, pero las derrotas deben servir para pisar tierra y volver a tomar impulso para saltar aun más alto si cabe. Estoy seguro que este equipo lo hará. Nunca habíamos llegado a estas alturas de la liga sin perder, y hasta los más grandes lo hacen. Mejor ahora que en las jornadas decisivas.
Como se suele decir popularmente, una mala tarde la tiene cualquiera... Hasta el mejor equipo del Mundo.
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2 comentarios:
Hay que considerarlo un accidente dentro de una magnifica trayectoria. De todas maneras ahora que jugamos miércoles y domingo, y tenemos tantos lesionado, habría que darles más minutos a jugadores como De Mul
Mala tarde la de ayer, algunos jugadores demostraron lo mercenarios que son, senti verguenza, como jimenez, que un equipo te gane solo por echarle mas cojones e ilusión que nosotros es totalmente una verguenza. Espero que en el partido de vuelta juegue el filial que seguro que le pone mas garra y mas gana.
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