martes, 6 de octubre de 2009

El almacén de mayoristas

Mucho se ha hablado de la amplitud de la plantilla del Sevilla, el famoso fondo de armario que se dice ahora. Veinticinco jugadores en plantilla y once posiciones para jugar cada partido.

Recuerdo hace varios años, tampoco demasiados, que se podía recitar de memoria el equipo titular que jugaba la mayor parte de los partidos a no ser que a alguno de ellos le ocurriera algo excepcional.

Eso ha ido cambiando con el tiempo, pero incluso con las famosas rotaciones que se pusieron de moda hará pocos años, siempre existía un buen grupo de jugadores que casi no se movían del famoso once de gala.

Voy más lejos cuando digo que el super Sevilla de "Juande-el Taco" que rotaba bastante, siempre tenía unos intocables, llámese Navas, Navarro, Kanouté, Alves...

Personalmente pienso que el Sevilla de hoy es el auténtico ejemplo de rotaciones en el fútbol moderno, pero eso viene dado por la calidad de la plantilla.

Hoy puede jugar Kanouté, pero mañana se queda en el banquillo porque hay un chaval que se llama Negredo que como la enganche... Lo mismo pasa con Navas, Perotti, Adriano, Capel, que se turnan en las bandas, hasta en el lateral derecho se cambian Konko, Sánchez y el mismo Adriano...

La calidad de esta plantilla es indudable, pero tal es el nivel, que posiblemente si les borraras el número de la camiseta a todos, nadie discutiría una alineación nunca.

Veinticinco jugadores, pero ningún nombre en concreto, pura calidad y armonía en cada partido juegue quien juegue.

El otro día con el Madrid, bendito partido, no leí ni la alineación, me limité a ver jugar al equipo y hasta un cuarto de hora de juego no me di cuenta que el central zurdo era Drago o que Kanouté estaba en el banquillo.

En un armario te cabe lo justo para ir tirando, con algunos recambios buenos y no tan buenos, pero en este equipo necesitan un almacén de mayoristas para meter todo lo que tienen ahí... bendito problema Manolo... Qué barbaridad.

martes, 1 de septiembre de 2009

Casta y coraje... arte y filigrana

Sevilla, Sevilla, Sevilla... El equipo de la casta y el coraje... Así comienza el himno de nuestro equipo, y así lo identifica mucha gente cuando habla de su comportamiento dentro del campo.

Un comienzo que debería ser esperanzador e ilusionante como cuando suena esa música triunfal del Maestro Roncales, pero lamentablemente no siempre está siendo así.

El comienzo de la temporada es una música incompleta, como si nos quedáramos en la primera estrofa, casta y coraje.

Una casta y coraje muy bien representada en jugadores como Palop, Escudé, Squilacci, Fernando Navarro, Duscher o hasta el mismo Jesús Navas...

Pero una casta y coraje que no es suficiente en equipos cuyo objetivo es algo más que ofrecer fuerza y lucha en su juego.

Tener la guardia alta, bloquear y cerrar el juego contrario y aprovechar el hueco que pueda dejar el rival está muy bien, pero el fútbol es mucho más. Y si hay material para que así sea, con más motivo para creerlo.

Tenemos que cantar el himno completo, no cansarnos en la primera estrofa y pensar que ya no hay más que decir. Eso hoy día no puede ser así.

Sevilla, Sevilla, Sevilla... Es el fútbol hecho arte y filigrana... Así continua la letra. Pero el juego no. De esa parte parece que tan sólo se tararea la musiquilla.

Eso es lo que preocupa, que después de dos años con el mismo director, el coro no ha aprendido la letra al completo.

Y no es por falta de intérpretes. El omnipresente Navas, Kanouté, Capel, Perotti, Acosta, Romaric, Adriano, Luis Fabiano... artistas sobran.

Pero aun así, nada más que nos ofrecen a veces algunos "solos" de calidad individual... Es como si en una orquesta de niños de guardería, metes a la guitarra a Paco de Lucía... el grupo desentona, pero vaya solo que se ha marcado ese...

En este aspecto creo que no se ha avanzado nada en la pretemporada, lamentablemente. En el arranque liguero, el mismo grupo del año pasado y ninguna novedad. Y así nos fue. Más de lo mismo que los rivales conocen ya de memoria.

En Valencia casta y coraje... ¿y qué seguía? Se nos volvió a olvidar...

Lo importante en la liga no es cómo se empieza, sino cómo se acaba. Esperemos que nosotros también sepamos culminar nuestro himno completo y hacer honor a él.

Sevilla, el equipo de la casta y el coraje, pero también es el fútbol hecho arte y filigrana... Y para rematarlo termina con un claro, Sevilla... ¡Triunfará!

Así sea.